Los fiordos son formaciones costeras esculpidas por la acción de los glaciares, y si hay una palabra que define a un fiordo de forma definitiva es ésta: grandioso. Son muchas las regiones del planeta que poseen fiordos, pero sin duda el oeste de Noruega es el lugar donde hay que dirigirse para encontrar la mayor concentración a nivel mundial. Además de la espectacularidad geológica que suponen, visitar los fiordos noruegos es encaminarse también al encuentro con un crisol de colores indescriptible: el verde de los valles combinado con el azul profundo del Atlántico norte; las tonalidades encendidas del ocaso; nubes plomizas, atravesadas de crestas rocosas, y todo el conjunto coronado en la lejanía por el blanco inmaculado del hielo, destelleando tímidamente al sol de medianoche. En definitiva, un lugar perfecto para olvidarse de todo y dejarse llevar.
El poder de los glaciares. Autor, Mimu_13
Interior de una casa típica, en Nordfjord. Autor, Kulturnett Sogn
Hardangerfjorden. Vista invernal. Autor, Torbjørn T
La Roca del Púlpito, en Lysefjorden. Autor, Masqtrekking
Lysefjorden entre nubes. Autor, Bright Green Pants
Panorama de un fiordo desde la orilla. Autor, Willem
Son muchos los atractivos históricos, naturales y culturales en cada zona de fiordos. En Sognefjord, por ejemplo, hallamos el considerado como el más profundo de Noruega, con fondos a más de 1300 metros bajo el nivel del mar; otros llaman poderosamente la atención por sus gigantescas cascadas procedentes del deshielo, que desbordan desde las alturas hacia la tersa superficie de las aguas en un espectáculo sobrecogedor: es el caso del denominado salto de Las Siete Hermanas, en el Geirangerfjord, a 62º de latitud norte. Este fiordo y el de Nærøyfjord están incluidos en la lista de Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, de modo que son asiduamente visitados y constituyen con todo merecimiento uno de los mejores destinos turísticos de naturaleza del mundo.
Misterios al amanecer. Autor, Paolo Camera
Típico fiordo en la región de Vestlandet. Autor, Mats Hage Eikemo
Primavera. Autor, Setra 400
Silueta en Lysefjorden. Autor, Yodod
El viejo arte de la pesca en Sognefjorden. Autor, Arnybo
Fiordo en Fjaerland a finales de verano. Autor, Murmelvieh
Isfjorden, en Svalbard. El fiordo más septentrional de Noruega. Autor, Torbjørn T
Muchos turistas deciden realizar travesías en kayak, actividad que proporciona unas sensaciones únicas al tiempo que se exploran rincones escondidos entre el mar y las montañas circundantes. Aunque si gustan de las emociones fuertes no hay nada como visitar el Preikestolen (El Púlpito), una gigantesca plataforma de piedra elevada 600 metros por encima de las aguas del Lysefjorden, y sin valla alguna que separe al público del abismo: todo un reto para los amantes de la adrenalina.
Nubes sobre Ullsfjorden. Autor, NikO18
Iglesia de Rugsund, en Nordfjord. Autor, Escarto
Aurora boreal sobre el fiordo de Lyngen. Autor, Even Mathisen
Mar de nubes en Trondheimsfjorden. Autor, Ingolf Zeiner Petersen
Espléndida vista de un fiordo desde la playa de Tromso, en Noruega. Autor, Moyan Brenn
Paisaje idílico en Vestlandet. Autor, Jechstra
Espectacular cascada sobre las paredes del Sognefjorden. Autor, Katri Niemi
Pero la belleza de Noruega no se restringe únicamente a los fiordos. Al norte del país es posible contemplar fenómenos únicos como el sol de medianoche, cuando el astro rey es visible durante las 24 horas del día y permite la actividad casi constante de locales y turistas. ¿Y qué decir de las famosas auroras boreales propias de las noches de invierno? Se trata de unas bandas celestes de colores verdosos, rosados o violetas que se producen por la acción de la radiación solar en latitudes elevadas: una visión fantasmagórica y bella de la que los vikingos se enorgullecían, al considerarla en realidad como el reflejo del sol en la armadura de las valkirias, las legendarias servidoras de Odín en el Valhalla escandinavo. Acompáñennos por esta atractiva selección de fotografías sobre los fiordos noruegos, donde podrán disfrutar de un espectáculo único antes de preparar su próximo viaje turístico del año. Quién sabe: quizás, a la vista del panorama, decidan cambiar de destino en el último momento…
Anochecer en Isfjorden, islas Svalbard. Autor, Hollandisk
En bicicleta hasta el fin del mundo. Autor, Torbjørn T
Maravillas de Noruega. Autor, Henke