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3 destinos para 3 vinos

Os proponemos un maravilloso viaje por tres de los rincones culturales y paisajísticos más importantes de la provincia de Ciudad – Real: Tomelloso, Ruidera y Villanueva de los Infantes


1. TOMELLOSO

Tierra de paso y cruce de caminos, la historia de Tomelloso es relativamente joven… “se comenzó a poblar en 1530 en tierras baldías de la villa de Socuéllamos, en torno a un viejo pozo utilizado por los pastores de la zona para abrevar a sus ganados”.
Muy pronto la naturaleza emprendedora de este pueblo unida a una desastrosa plaga de filoxera en otras comarcas españolas y francesas (historia rocambolesca para descubrir), haría de este lugar el gran centro de producción vitivinícola que es actualmente. Desde sus bodegas y cooperativas se “vende” mosto y vino a medio mundo.
La ciudad manchega de la pintura, la Atenas de La Mancha, cuna de artistas y escritores de fama mundial, pragmática y enérgica, sus gentes y sus vinos han influido en el pincel vital y realista de López Torres, los certeros e inolvidables relatos de Francisco García Pavón, sus bombos, chimeneas y antiguas cuevas – bodega.
Por su carácter, siempre preparado para celebrar una ocasión especial, os recomendamos un espumoso, brut nature que dirían los entendidos, de fermentación tradicional.

2. LAGUNAS DE RUIDERA

“Creadas por el encanto del mago Merlín…” reverberan las palabras de Cervantes en aquel visitante que contempla asombrado el entorno del Parque Natural de Lagunas de Ruidera. Como los aromas frutales de un vino tinto joven, los sentidos aquí quedan embriagados por la cascada de aromas que fluyen en la retina del visitante primerizo.
Aquel viajero que acude por primera vez a Ruidera y sus lagunas, cuando lo hace desde la llanura manchega, vasta y extensa, percibe la sensación de acudir a un oasis, un remanso de paz, bálsamo y conjura contra el frenético ritmo de la vida urbana.
Sus cristalinas aguas de un azul puro e intenso, con verdes contrastes en sus orillas de encinar, álamo, olmos, juncos, masiegas, matorrales, espinos… vigiladas por antiquísimas sabinas, albar de reserva, y enebros de buen porte.
Belleza kárstica única en España. Travertinos o barreras tobáceas singulares que otorgan a este espacio natural protegido una singularidad geológica y ecológica de primer orden en Europa.
Un vino idóneo para este tesoro natural lo encontraremos en un blanco frutal, de suaves toques florales y herbáceos. Aromas de romero, tomillo y brezo que Ruidera nos regala.

3. VILLANUEVA DE LOS INFANTES

En el Campo de Montiel, antaño tierra de frontera con la media luna y custodia de la Orden de Santiago, Villanueva de los Infantes pugna en orgullo, tradición y solera por ser la cuna de “aquel lugar del que Cervantes no quiso acordarse”. No en vano, sus calles adquieren el lustre y celo solariego, de sobrio invierno castellano y austero porte en sus fachadas.
Pasear por Villanueva de los Infantes con la mirada acostumbrada a descifrar la simbología de la cantería que ostentan sus fachadas, portadas y blasones, reporta al visitante la sorpresa de encontrar en este rincón escondido de La Mancha, un tesoro literal. Además en el doble sentido de la expresión. Pues la increíble belleza de su elegante patrimonio monumental labrado en la típica arenisca roja del Campo de Montiel, se impregna como las nieblas de otoño, con la atmósfera literaria que ha transitado sus calles desde que la cultura del Siglo de Oro abrió sus puertas en la singular Casa de Estudios.
Aquí Jiménez Patón impartió gramática. Quevedo distraía su destierro. Lope de Vega ignoraba a Cervantes. Y Cervantes, más grande que ninguno, olvidado por esa envidia inculta que en España se siente por los genios contemporáneos, olvidada a su vez, acordarse de esos lugares y esas gentes que bien conocía hasta el fondo de sus más profundas miserias.
En pocos lugares del mundo como en este pueblo con título de ciudad, se percibe la atmósfera caballeresca y fantástica que se lee en las páginas del Quijote.
Un buen vino, un buen crianza, delicado y cuidado, con historia y con un futuro que pasa por nuestro paladar a toda velocidad, será el elegido para descorchar en tan noble rincón.


Un artículo de Antonio Bellón Márquez para sabersabor.es ©


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Ecoturismo por los Parques Nacionales y Naturales de Ciudad Real

Os proponemos una serie de experiencias y actividades para descubrir algunos de los espacios naturales y rurales más valiosos de Europa ubicados en la provincia de Ciudad Real (España): los Parques Nacionales y Reservas de la Biosfera de Tablas de Daimiel y Cabañeros, y los Parques Naturales de Lagunas de Ruidera, y Valle de Alcudia y Sierra Madrona. Sin duda, el destino ideal para los que quieren vivir una auténtica experiencia de ecoturismo y naturaleza, aprovechando al máximo la estancia a la vez que se conservan los valores ecológicos y paisajísticos de cada destino, contribuyendo a sostener el entorno rural en el que se llevan a cabo, participando en el estilo de vida de las poblaciones locales y en la conservación del patrimonio natural y cultural.


Día 1

Nuestro viaje dará comienzo en el Parque Nacional de las Tablas de Daimiel, Reserva de la Biosfera desde 1981 y ecosistema único y característico de La Mancha. Por medio de un itinerario interpretativo descubriremos los secretos ecológicos, geológicos y paisajísticos de este enclave privilegiado. Desde el observatorio de la Isla del Pan apreciaremos el trasiego incesante de diferentes especies que salen y entran al Parque, como las esbeltas garzas o los grupos de ánades que toman los rastrojos al amanecer. Observaremos especies tan emblemáticas como la Avutarda (Otis tarda), el Sisón Común (Tetrax tetrax), o la rarísima Ganga Ortega (Pterocles orientalis), que comparten hábitat con los bandos de Grullas (Grus grus) invernantes. Un auténtico muestrario de especies en donde conviven la amenazada Malvasia (Oxyura leucocephala) o el Porron Pardo (Aythya nyroca), con Zampullines cuellinegros (Podiceps nigricollis) y Calamones (Porphyrio porphyrio), Flamencos rosados (Phoenicopterus ruber), los llamativos bandos de Bigotudos (Panurus biarmicus), los Escribanos Palustres (Emberiza schoeniclus) y el escaso Carricerin Real (Acrocephalus melanopogn)… un espectáculo asegurado durante todo el año. A la hora de comer disfrutaremos de un almuerzo campestre. Por la tarde visitaremos la Motilla del Azuer, uno de los más importantes yacimientos arqueológicos de España. Descubriremos el origen de este singular asentamiento de la Edad de Bronce: una fortificación con más de 4.000 años de antigüedad, donde encontraremos el pozo más antiguo de la Península Ibérica.

ecoturismo Tablas de DaimielTablas de Daimiel

Tablas de DaimielTablas de Daimiel

Tablas de Daimiel ecoturismoTablas de Daimiel

turismo arqueológico Motilla AzuerYacimiento arqueológico de la Motilla Azuer


Día 2

Realizaremos un inolvidable recorrido de naturaleza por el Parque Natural de las Lagunas de Ruidera, un enclave privilegiado formado por un rosario de 15 bellas lagunas y que en conjunto constituyen todo un espectáculo para los sentidos, además de una curiosidad ecológica y geológica de primer orden en España y en todo el ámbito europeo. Los grandes bosques mediterráneos de encinas (Quercus ilex) y sabina albar (Juniperus thurifera), y una fauna impresionante, con más de 250 especies de vertebrados, harán las delicias de los visitantes. A la hora del almuerzo, nos espera una deliciosa y auténtica comida típica en un cortijo / huerta de la zona, un lugar lleno de encanto y esencia manchega donde vamos a disfrutar de una comida típica a base de platos tradicionales. Por la tarde realizaremos un Taller Artesanal de Esparto, una fibra obtenida de diversas plantas silvestres de la zona. Con dicha fibra se elaboran sogas, alpargatas, cestas, alfombras, utensilios, etc.

Laguna del ReyLaguna del Rey. Autor, Bernardo Sevilla

Ruidera hundimientoEl Hundimiento. Lagunas de Ruidera. Autor, sabersabor.es

ecoturismo Lagunas de RuideraLagunas de Ruidera

taller EspartoTaller de Esparto

Huerta Villanueva de los InfantesHuerta Manchega

Utricularia australisUtricularia australis


Día 3

Descubriremos el Parque Nacional de Cabañeros: un lugar único en el mundo. Porque aquí sobrevive intacto el gran bosque mediterráneo de Europa, donde el visitante aún puede verse rodeado de la fauna ibérica más amenazada, y ver fósiles de más de 500 millones de años de antigüedad. Su excepcional conservación permite al visitante disfrutar de la gran reserva natural ibérica. En su paisaje de extensas llanuras y bosque abierto viven grandes mamíferos como la cabra montés (Capra pyrenaica), el águila imperial ibérica (Aquila adalberti) y el buitre negro (Aegypius monachus), además del ciervo ibérico (Cervus elaphus). Sus más de mil especies vegetales, sus fósiles del Ordovídico, y las cabañas de carboneros que dan nombre al parque son sólo una pequeña parte de su atractivo. Acompañado por nuestro guía intérprete, recorremos el interior del Parque Nacional descubriendo todos sus secretos y disfrutaremos de un almuerzo campestre.

Cabañeros Cabañeros

Buitre negro CabañerosBuitres negros

Parque Nacional CabañerosParque Nacional de Cabañeros

Berrea CabañerosBerrea

Boquerón del EstenaBoquerón del Estena


Día 4

Realizaremos un recorrido por el Parque Natural del Valle de Alcudia y Sierra Madrona: un lugar donde disfrutar de la naturaleza aún en estado virgen. Sus bosques, entre los que se encuentran árboles centenarios y milenarios, la riqueza paisajística de sus parajes y las más de 160 especies de aves que lo habitan hacen de este parque natural uno de los más bellos y desconocidos de España. El Parque Natural presenta dos paisajes diferenciados. Por un lado una enorme extensión de dehesas de aprovechamiento secular ganadero que conforma el Valle de Alcudia, con su mar de encinas y pastizales en el que se pierde la vista. Por otro las sierras y montes del sur, de relieve quebrado, crestones y pedrizas que constituyen Sierra Madrona. El parque alberga diversas manifestaciones de vulcanismo de Ciudad Real. A medio día realizaremos un almuerzo campestre.

Valle de AlcudiaValle de Alcudia

Chorrero de la SierpeChorrero de la Sierpe

encina milenaria AlcudiaEncina milenaria

SisapoYacimiento arqueológico de la ciudad de Sisapo en La Bienvenida

Solana del Pino Valle Sierra MadronaSolana del Pino Valle, Sierra Madrona

Peña escrita FuencalientePeña escrita, Fuencaliente


Un artículo de Antonio Bellón Márquez ©


Si estas interesado en realizar esta irresistible escapada, contacta con sabersabor.es 


Fotografía de portada: Lagunas de Ruidera. Autor, Miguel A. García

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Ruidera. Un oasis en mitad de España.

lagunas de ruidera

Más allá de las poéticas descripciones cervantinas, las lagunas de Ruidera, enclavadas en el Campo de Montiel, forman el parque natural más interesante de Castilla – La Mancha. Sus excepcionales paisajes dominados por el agua y el verde, contrastan con el entorno seco en que se insertan.
Un rosario de bellas lagunas de origen cárstico, y que en conjunto constituyen todo un espectáculo para los sentidos, además de una curiosidad ecológica y geológica de primer orden tanto en España como en todo el ámbito europeo.

Disponeos a descubrir este auténtico oasis de la llanura manchega.

Ruidera. Autor, Dan

Pura vida, Ruidera. Autor, Dan

El origen de este sistema húmedo es el afloramiento en la superficie de corrientes de agua subterráneas procedentes del circundante Campo de Montiel. Cada laguna de este singular espacio natural, protegido bajo la figura de parque natural, está separada de la siguiente por barreras y terrazas, lo que da al conjunto un peculiar atractivo. Pero la especial belleza de Ruidera está en el intensísimo color de sus quince lagunas: unas veces azul turquesa, otras verde cristalino, más propio de la idea que todos tenemos de lugares exóticos y tropicales. La sensación del visitante al ver estas particulares tonalidades de las aguas es de total irrealidad.
Además, al ser el terreno calizo, algunas lagunas han disuelto literalmente las orillas en las que se asientan y se han ido hundiendo poco a poco. Como testigos de la primitiva altura que alcanzaban quedan sobresalientes cornisas asomadas sobre las aguas, cuya parte inferior, blanqueada por la cal del terreno, refleja los espectaculares colores.

Sabina albar. Autor, acusticalennon

Sabina albar. Autor, acusticalennon

La vegetación predominante alrededor de las lagunas es la palustre. Una orla de carrizo y enea rodea muchas de ellas, formando una muralla impenetrable, mientras que en las laderas cercanas abundan las encinas y la vegetación mediterránea.
También son frecuentes las sabinas y enebros de gran tamaño. La sabina albar (Juniperus thurifera) es un árbol reliquia de otros tiempos, adaptado para soportar condiciones climatológicas extremas de temperaturas muy altas en verano y muy bajas en invierno, además de una pluviosidad muy escasa. La frugal sabina es capaz de prosperar en estas condiciones, aunque su crecimiento es muy lento. Debido a la dureza del medio en el que crece, el sabinar siempre forma manchas discontinuas, puesto que si los árboles estuviesen muy juntos no podrían desarrollarse bien.
Las sabinas de Ruidera, de buen porte, son centenarias. Estrictamente protegidas.

Aguilucho lagunero. Autor, Francisco Montero

Aguilucho lagunero. Autor, Francisco Montero

La fauna dominante en Ruidera son las aves acuáticas: ánades reales, patos colorados, porrones, fochas, cercetas y garzas nidifican entre los cañaverales o se acercan aquí a pasar el invierno o a descansar durante sus viajes migratorios. La gran extensión de la superficie acuática da cobijo también a una ictiofauna en la que sobresalen la boga, el barbo y la carpa, además del lucio y del black-bass, voraces especies foráneas introducidas con fines pesqueros.
Sin embargo, la especie reina de las lagunas es el escaso aguilucho lagunero (Circus aeroginosus). Esta rapaz es de gran belleza: en el macho dominan los tonos blanquecinos en su parte inferior, mientras que la hembra es inconfundible por su color chocolate y las manchas color crema que presenta en la cabeza y en los “hombros” de las alas.
Este águila de tamaño mediano es una especialista en la caza por sorpresa entre los cañavelares. Sobrevuela las masas de carrizos y eneas a la búsqueda de presas (pequeños mamíferos, aves acuáticas, reptiles…). De repente, cuando localiza algo interesante, se para y se lanza para capturar a su víctima.
En los montes cercanos habitan los jabalíes, los zorros, los conejos, las liebres y las aves rapaces, mientras que en los cultivos de secano de los campos circundantes subsiste una importante población de aves esteparias, entre las que destacan la perdiz y la avutarda, una de las mayores aves españolas.

ruidera. Autor, Frankeke Oteo

El mar de La Mancha. Autor, Frankeke Oteo

El parque natural de las lagunas de Ruidera abarca una extensión cercana a las 4000 hectáreas que protege el conjunto lagunar, así como el cercano embalse de Peñarroya. Y alberga otra una importante sorpresa que hará las delicias de los amantes de Cervantes: la cueva de Montesinos, citada expresamente en “Don Quijote de La Mancha”. A decir verdad, todo el entorno de este oasis está lleno de puntos que evocan las hazañas del Caballero de la Triste Figura.
En el famoso libro, Miguel de Cervantes escribió en el siglo XVII que el origen de esta zona lacustre se debe al encantamiento de la Dueña de Ruidera, una legendaria dama.
Volviendo a la cueva de Montesinos, Don Quijote la eligió para retirarse a reflexionar una temporada, pero tuvo la mala pata de caerse por ella y quedar maltrecho.
Por supuesto, la cueva es visitable, pero es aconsejable llevar linternas y calzado adecuado a prueba de resbalones, si no se quiere seguir la suerte del famoso hidalgo.
Sin embargo, si se quieren conocer a fondo estas profundidades, lo mejor es contratar una visita guiada con sabersabor.es. Con ellos es posible evocar perfectamente la atmósfera cervantina de la cueva, descubriendo las formas que el agua ha modelado en las paredes de la gruta: la cara de Don Quijote, la cabeza del cocodrilo, la figura de la Virgen, el Belén, la Teta de la Vaca… y la secreta “cámara el tesoro”, una pequeña sala de la cueva cuyo techo está recubierto de brillantes capas de cuarzo. El fondo de la cueva está ocupado por un lago de azuladas aguas cristalinas.
Todo un placer para los sentidos.

Entrada a la cueva de Montesinos. Autor, Victor Díaz

Entrada a la cueva de Montesinos. Autor, Victor Díaz


Un artículo de Antonio Bellón Márquez


Si queréis conocer todos los secretos de este lugar único e inigualable, os propongo vivir esta experiencia: Ruidera, el oasis de La Mancha